En este 2021 continuamos construyendo y trabajando desde la virtualidad, así mismo siguen llegando nuevas formas de vivir la normalidad, una de ellas es el modelo de alternancia, la nueva modalidad para el regreso a clases o al trabajo, que abarca dinámicas presenciales combinadas con la virtualidad. Eso sí, el éxito de la alternancia depende de cumplir con los protocolos de bioseguridad para así garantizar el bienestar de todxs.
Las instituciones educativas y las empresas están abriendo nuevamente sus puertas para recibir a estudiantes y colaboradores. La reactivación de estos sectores desde el modelo de alternancia ayuda a alinear el proceso de cuidado con el tema laboral, académico y/o socioemocional de los niños, jóvenes y colaboradores; según Álvaro Galiana, ex secretario de la Sociedad Latinoamericana de Infectología Pediátrica (SLIPE), “la socialización es imprescindible para un buen desarrollo y crecimiento. Los niños deben estar con sus pares aprendiendo a convivir y específicamente fuera del ambiente familiar”.
El modelo de alternancia es posible gracias a una nueva forma de ver el mundo, esta modalidad se conoce como FISITAL, según The New York Times, este término se empezó a utilizar durante la pandemia; significa una combinación entre el mundo físico y el mundo digital, una nueva realidad que trae consigo varios beneficios y experiencias nuevas, acompañando la alternancia de manera gradual, progresiva y segura.
Desde hace unos meses se ha empezado a implementar la modalidad FISITAL, todo dentro de un proceso de regreso progresivo y gradual. La ministra de educación de Colombia, María Victoria Angulo, asegura en una entrevista para la revista Semana que al momento de incluir los protocolos de seguridad, las aulas de clases se convierten en uno de los lugares más seguros para la interacción social.
¿Cómo podemos apoyar esta nueva modalidad?
Este modelo de alternancia pretende apoyar los procesos educativos, desde la ruralidad hasta en las grandes ciudades, la pandemia ha tenido impactos significativos; es por esto que los gobiernos han buscado diferentes estrategias para contrarrestar las secuelas de la pandemia. Adicionalmente, es de gran relevancia que continúen trabajando en la construcción de soluciones que ayuden a cerrar las brechas tanto educativas como emocionales para llegar a todos los estudiantes. La ministra de educación de Colombia se refiere a estos objetivos y menciona “Cuando hablamos de brechas emocionales tienen que ver con las competencias que ahora se denominan socioemocionales. Hace unos años hablábamos todo en el marco de competencias ciudadanas; pasan por la empatía, la resolución de conflictos, manejar la incertidumbre”.
El regreso a la presencialidad tiene como objetivo promover la salud física y mental, así como el bienestar, además de los objetivos de aprendizaje; lo cierto es que así se esté inmerso en la virtualidad, eventualmente regresaremos a la presencialidad. Pensando en los retos que dicha transición puede traer preparamos algunas recomendaciones que serán de ayuda a la hora de participar en la alternancia:
- Refuerza el autocuidado: está en nuestras manos la manera en que se reducirán los casos de la COVID-19, para eso es importante hacer uso adecuado de los protocolos de bioseguridad, como lo es el uso de mascarillas, el correcto lavado de manos y el distanciamiento social
- Apoya los procesos virtuales: las clases virtuales se han convertido en parte del día a día, si bien es un reto mantener el ritmo, la clave se encuentra en fomentar los vínculos y aumentar las interacciones entre estudiantes y docentes, mientras se continúa estudiando. Lo cierto es que existen muchas herramientas y plataformas como Mentimeter, Kahoot, Flippity que pueden ayudar a superar los retos que la virtualidad trae y ayudarán con el ingreso al mundo FISITAL.
- Entiende que es un proceso que lleva tiempo: la alternancia no es un modelo que se puede implementar de la noche a la mañana. Es un proceso lento, que requiere determinación, esfuerzo, entre otros; y que se debe realizar por etapas para así asegurar el bienestar de todxs. También se deben implementar jornadas cortas que permitan un regreso parcial a los distintos espacios físicos.
- Establece el regreso como voluntario: para algunas personas aún es riesgoso el hecho de volver a la presencialidad, por eso el regreso a las aulas debe ser voluntario y gradual para generar confianza tanto en los estudiantes como en sus familias, debe ser igual para entornos laborales.
- Practica la empatía: aprender a ponerse en el lugar de los demás para entender cómo están y cómo se sienten es muy importante. Al hacerlo será más fácil percibir sentimientos, pensamientos y emociones tanto de docentes como de estudiantes y familias. La alternancia es un modelo marcado por la comunicación: hay que escuchar, saber cuál es la percepción que se tiene frente a esta nueva modalidad y qué tan cómodos se sienten al implementarlo. Adicionalmente, se medirán qué tan efectivos están siendo las herramientas utilizadas para regresar a la presencialidad y combinarlo con el entorno virtual.
¿Cómo se ha manejado en Colombia?
Desde agosto de 2020 hasta el día de hoy, en Colombia se ha implementado el modelo de alternancia en distintas instituciones educativas. El Presidente Iván Duque Márquez junto con las secretarías de Educación han construido los protocolos para el regreso seguro a las aulas; todo con el acompañamiento de expertos en salud.
Para el gobierno colombiano “la protección de los niños es una prioridad”, esta modalidad de alternancia trae beneficios para el desarrollo de ciertas competencias académicas, la salud física y socioemocional de los niños y jóvenes. En el 2021 el 71% de las Secretarías de Educación del país iniciaron el retorno gradual, progresivo y seguro de los estudiantes y docentes a las aulas.
¿Qué han hecho los gobiernos y Ministerios en otros países de Latinoamérica en temas de alternancia?
En Latinoamérica se han adecuado programas y medidas para la implementación de los modelos de alternancia, en todos se ha manejado de manera distinta y todo es debido a la infraestructura en tecnología que se dispone en el país, así como el acceso a internet y a las plataformas. Aquí te contamos lo que otros países de Latinoamérica han implementado como estrategias para asumir la alternancia:
- Uruguay: El país se convirtió en líder en educación virtual en Latinoamérica, siendo el primer país en implementar el modelo de alternancia; desde hace una década han dotado a estudiantes y docentes con computadores e internet, lo que permitió una rápida adecuación al modelo virtual. Han implementado distintos métodos para la virtualidad y el gradual regreso a la presencialidad como la creación de guías de apoyo socioemocional, concursos, propuestas, contenidos, desarrollos especiales y adaptaciones de otros programas como robótica, pensamiento computacional y diseño.
- Perú: Prevén el 2021 como un año flexible y dinámico, implementando tres modalidades para el regreso a clases: remota, semipresencial y presencial completa; consideran fundamental el punto de vista en conjunto de padres de familia, docentes y autoridades locales, además del cumplimiento de los protocolos de bioseguridad establecidos por el Ministerio de Salud.
- Ecuador: En un principio implementaron el modelo “Aprendamos juntos en casa” para garantizar la continuidad del servicio educativo, después avanzaron en la construcción de herramientas fundamentales para continuar con el servicio educativo bajo el plan “Juntos aprendemos y nos cuidamos”. Diseñaron un programa formativo emergente el cual tiene como objetivo desarrollar permanentemente las competencias específicas en el docente a través de procesos de capacitación continua.
- Chile: Allí implementaron la estrategia “Aprendo en casa” y el gobierno se encargó de la distribución de software educativo en todo el país.
Si bien entrar en el modelo de alternancia puede parecer retador, lo cierto es que poco a poco debemos adaptarnos y hacer los ajustes necesarios para continuar con la vida personal, académica, laboral, educativa, social entre otras. La modalidad FISITAL llegó para quedarse, y la alternancia es la nueva forma de llevarla. Así que juntos aprendemos y avanzamos para trabajar por conseguir ese bienestar individual y colectivo tan anhelado por todos.